El Braco alemán es un perro de sólida constitución, bien proporcionado y musculoso, muy fuerte y con una notable resistencia a la fatiga. La impresión que debe dar es la de un perro de temperamento enérgico y potente con buena armonía en la relación entre las diversas partes del cuerpo y expresión franca y segura. Puede correr tanto al galope como al trote, siempre con paso desenvuelto y sostenido, que está en condiciones de mantener durante una jornada completa de caza, sabiendo superar cualquier tipo de obstáculo natural que se le presente en el terreno.